Junto con la fregona y la sangría, una de las principales aportaciones de nuestro país a patrimonio cultural de la humanidad es la figura del cuñao. El cuñadismo es la gran contribución hispana al avance de la estupidez humana, siendo por tanto un fenómeno sobre el que merece la pensa reflexionar. Otros ya lo han hecho por nosotros, Valga como muestra este artículo publicado en su día por El Mundo.
Radiografía del cuñadismo español, la pandemia que martiriza un país entero
Pedro Vera, dibujante de El Jueves, publica Mi puto cuñado, un libro en el que retrata las escenas más casposas de este rancio fenómeno que ya 'analizaron' hace algunos años en televisión Jesús Quintero o 'Muchachada Nui'. El hombre es un cuñado para el hombre, asegura el humorista Pepe Colubí parafraseando a Plauto.
El cuñadismo ni se crea ni se destruye, sólo se transforma. Quizás por ello este singular fenómeno, cultivado a lo largo de los tiempos a base de muletillas, lugares comunes, perogrullos y tópicos rancios, vuelve a estar hoy en boca de todo el mundo.
El libro de Pedro Vera aspira a convertirse en la Biblia del movimiento cuñadil en España tras el exitoso Ranciofacts, la primera entrega sobre la ranciedad hispana. Un total de 112 páginas cargadas de "frases caducas extraídas de lo más profundo de las sobremesas familiares". «El manual definitivo del "garrulismo ilustrado"», tal y como lo define Pepe Colubí en el prólogo.
Según palabras del propio autor: "El cuñado es un ser perfecto, superior. Un ser de luz, un ente capaz de traspasar océanos con su sabiduría. Sabe de todo y puede opinar de lo que quiera, de cualquier tema que le preguntes. Y responde con frases como: «Yo tuve un profesor que
»".Pese a lo que pueda parecer, este mal endémico que asola el país, no es nuevo. "Parece que hemos descubierto la pólvora, pero esto viene de la noche de los tiempos", cuenta Vera. "A Flaubert, en el siglo XIX, ya le tocaba la moral que la gente llegase a su casa para hablar del tiempo, por ejemplo. Y los echaba".
Jesús Quintero ya se adentró en el cuñadismo de la mano de Antonio Rivero Crespo, (El Peíto) y Juan Joya Borca (El Risitas) en El Vagamundo.
También lo hicieron Joaquín Reyes y Ernesto Sevilla, en o 'Muchachada Nui', allá por 2007.
¿Por qué? "Nos hacía gracia escenificar la figura del 'te lo dijeeeeee...'. Esa cosa ventajista tan española. Porque el cuñado no es que haga una predicción, sino que se gusta evaluando las cosas a toro pasado, cuando algo no ha salido del todo bien", explica Reyes.
O como dice Pepe Colubí: "El cuñado te lleva la contraria gratuitamente porque sí, porque tú no sabes, porque él ya está de vuelta, lo ha probado hace tiempo y lo supo antes que nadie [...] Una pequeña duda tuya es gasolina para él. Tu autoestima es su kriptonita".